En Segovia ciudad, dentro del parque Nueva Segovia, encontraremos un pequeño lago llamado Lago Alonso.
Es una antigua cantera inundada por la lluvia la cual gracias a que también recibe aportes de manantiales, tiene agua durante todo el año.
Cuentan los lugareños que en este sitio se llegaron a pescar enormes truchas; sea cierto o no, la realidad hoy en día es bastante diferente.
Al acercamos a este lugar, nos daremos cuenta de que, a pesar de algunos intentos por parte de la Administración de recuperar el entorno, está muy descuidado. Las aguas están muy lejos de estar limpias y en sus profundidades reposan todo tipo de objetos (carros de la compra, colchones, muebles…). Además, suele estar frecuentado por gente variopinta, y aunque parece que no ha habido conflictos, puede que no sea el ambiente más propicio para el ejercicio de nuestro deporte.
Si a pesar de lo anterior, decidimos probar a echar un rato aquí por proximidad o curiosidad, debemos saber que en sus aguas sobreviven milagrosamente carpas y blackbass, y probablemente también algún percasol.
Los blackbass son pequeños por lo general, por lo que se pueden pescar con pequeños vinilos o cucharillas del 1 o 2; las carpas en cambio pueden llegar a pesar varios kg, aunque tampoco esperemos batir el récord de España.
Un dato importante a tener en cuenta es que, hay algunos peces afectados por un tipo de bacteria, que nos puede causar serios problemas cutáneos. Se recomienda por tanto no tocar directamente ningún pez con las manos y utilizar guantes o algún plástico para protegernos, además de limpiarnos con gel hidroalcohólico al acabar la actividad.
Saqué hace 1 mes y algo una de las royales más bonitas que tengo en la galería allí, de casi 5 kg.